Un as en la cosecha cafetalera de Villa Clara

 

 
Por Bárbara Muñoz

En el  macizo montañoso de  Jibacoa en el municipio  Manicaragua, se encuentra la Finca Escuela El Jaguey,  laborada por el campesino Amado Hernández Salas. Este hombre desde hace 13 años se dedica al cultivo del café y no emplea productos químicos al trabajar la tierra.

 Esta es una da las 17 fincas de referencias en la provincia de Villa Clara y Amado es uno de los productores  que logra en rendimientos 0-27 toneladas por hectáreas.

 “El abono que uso es el compós, y lo logro a partir de los residuos de las cosechas, aquí no desperdicio nada, alegó Amado. También   empleo el  estiércol del ganado vacuno y ya estoy metio de lleno en la lombricultura”.

 También   este productor,  para evitar la erosión de los suelos  construye sus propias barreras de contenciones vivas  y muertas, utilizando cepas de plátanos y tranques  de maderas;  y  así  evita que el agua cuando corra por la montaña,  arrastre la capa vegetal.

En las siete hectáreas que tiene la finca además de café, cosecha aguacate, mango, y plátano, y los  rendimientos son elevados y de alta calidad.

 Para Amado Hernández no hay domingo,  me dijo, “el campesino tiene un día que no trabaja y es cuando llueve”.Por eso está propuesto para integrar el movimiento de avanzada  de la provincia, donde se concentra el 60% de la producción de café en el macizo  de Jibacoa.